En psicología, la disonancia cognitiva es un proceso que se caracteriza por la sensación de malestar producida cuando tenemos 2 o mas ideas incompatibles y no nos decidimos por una de ellas.
¿Cómo se reduce esta disonancia? Podemos hacerlo de varias maneras como cambiando nuestra conducta, alterando el ambiente, añadiendo nuevas informaciones, alterando nuestras creencias...etc.
Por si pensabas que este proceso es del todo desconocido para ti, allá van unos ejemplos con los que seguro te sentirás identificado.
¿Jamás has decidido no ir al gimnasio aunque tu objetivo sea perder peso? ¿Jamás te has fumado un cigarro cuando estabas dejando de fumar? ¿Jamás has comido chocolate en medio de una dieta? Pues bien, esas dos ideas incompatibles (fumar porque te gusta o dejarlo porque es mas sano) crean en ti una sensación de malestar que debemos reducir de alguna manera. La manera mas común de las comentadas antes es modificar tus creencias. En este ejemplo, modificar nuestras creencias pasaría por convencernos verbalmente diciéndonos a nosotros mismos que lo perjudicial de fumar se nota a largo plazo y que por un día no pasa nada (algo parecido pasa con las dietas y el chocolate).
Lo curioso de esto, es que la disonancia cognitiva favorece que el ser humano se auto justifique y esto es mas importante de lo que pensamos. El hecho de sentir malestar nos lleva a justificar nuestras decisiones a pesar de que sean erróneas.
Es importante señalar que este proceso se da cuando tenemos libertad de decisión (no cuando nos obligan a realizar algo).
Supongo que llegados a este punto a cualquiera se le habrá ocurrido que este proceso no solo se da en personas normales a diario. Este proceso, entre otros, es la explicación de porque Hitler justificó su matanza, por ejemplo, y así miles de ejemplos que a todos se nos vendrán a la cabeza con que pensemos un poco.
Sin embargo, a pesar de todo, es un mecanismo esencial para asegurar nuestro bienestar. Lo importante es asegurarnos de cuando sucede y no caer en el autoengaño, la crítica o la mentira.
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